“… la distinción entre filosofía política y
ciencia política puede resumirse “probablemente" a una diferencia de
grados, a una tendencial polarización de maneras de pensar que se traduce en
una diferente selección y presentación de los problemas.”
Danilo Zolo1
Al intentar diferenciar la filosofía
política de la ciencia política, baste, para el análisis, abordar dos aspectos:
el contenido de las interrogantes que
abordan, lo que nos lleva a su
objeto de estudio y a sus finalidades, y,
las características que les distinguen, lo que nos remiten a los métodos de construcción de sus saberes, a su
naturaleza, y a los instrumentos de valoración de cada una.
A partir de la idea de política
como el ámbito en el que tienen lugar las interrelaciones sociales, o en el que
se desarrollan las acciones, que tienden directa o indirectamente, por la vía
de hecho o de derecho, a la conquista y ejercicio del poder a partir del cual
se forman y toman de las decisiones de carácter general y obligatorias en una
sociedad dada2, se puede diferenciar con claridad, que mientras la
filosofía política centra su interés en el por
qué e incluso, el para qué,
de los temas políticos, a la ciencia política lo que le interesa es el cómo3 funciona o el cómo opera, incluso el de
que se vale para operar, esa actividad social que se denomina la política.
La filosofía política se esmera por
saber si para la sociedad lo mejor es la democracia o la autocracia, si las
decisiones deben ser o no obedecidas, qué es lo que legitima su obligatoriedad,
o cual es la razón primera de ese poder de decisión. La ciencia política, en
cambio, busca explicar cómo funciona la democracia o la autocracia -en general
el gobierno o el sistema político- y, por ejemplo, cómo se toman las decisiones
y qué es lo que obliga a obedecerlas, ello afín de establecer leyes que expliquen
los mecanismos que operan alrededor del gobierno, el sistema o el deber político.
Por lo que hace a las características
que permiten diferenciar a la filosofía política de la ciencia política, el
punto de partida es el método que una y otra utilizan para construir su
conocimiento.
El conocimiento filosófico-político se
desarrolla con base en un sistema lógico deductivo, especulación basada en el
pensamiento crítico4. La ciencia política se basa en un sistema
empírico-inductivo que permite, a partir de la acumulación de saberes, la
comprobación o refutación del conocimiento previo5, obtenido con base
en “la investigación como instrumento de validación”6, y la experimentación
como prueba de aplicabilidad7.
En relación con la naturaleza de cada
una, la filosofía política, como ciencia, es prescriptiva, valorativa y
especulativa, la ciencia política, en cambio es explicativa, experimental y aplicativa8.
Finamente, mientras la filosofía
política es valorada a partir del rigor lógico que presenta la coherencia de
sus deducciones, la ciencia política es valorada a partir de la verdad y
corroboración de sus explicaciones y leyes, así como de su aplicabilidad,
incluso, de la mayor o menor objetividad del científico9.
Consideración final. La filosofía política,
es pensar, valorar, criticar, cuestionar las ideas alrededor de lo político. La
ciencia política es accionar, experimentar, medir, aplicar teorías para
comprobarlas. En política, filosofar es razonar en relación con las causas y
fines de la misma, hacer ciencia es aplicar conocimiento en su práctica cotidiana.
NOTAS:
1. Citado por Bobbio
en “Razones de la filosofía Política”, ensayo. Serie de ensayos: “Norberto Bobbio: El filósofo y la Política.
Antología”. Compilador: José Fernández de Santillán. Fondo de Cultura
Económica. Sección de Obras de Política y Derecho. Segunda edición. México D.F.
2002. Pág. 64.
2.
El desarrollo de
esta concepción de la política sigue básicamente la planteada por Bobbio (Ensayo La Política, op cit. pág. 135), sin embargo, a diferencia de la del turinés, el eje de la
misma no es el poder último, aquel a partir del cual Weber define el Estado (En
Bobbio, Op. cit., Max Weber y los
Clásicos, pág. 91 y ss.), sino el ejercicio de tomar decisiones que valen
para todos, lo que permite incluir en la misma a los partidos políticos,
líderes de opinión o grupos de presión. La inclusión, en esta concepción, de
las vías de derecho o hecho como parte de la política, obedece a la consideración
“como políticas” de todas aquellas acciones que (una revuelta, una marcha, una
toma de instalaciones) tienen la capacidad de incidir indirectamente –presionando
al legislativo, por ejemplo- en la toma de las decisiones generales y
obligatorias. Cómo podrá apreciarse, en el cenit de esta idea de política se
encuentran las decisiones del poder público.
3. Suárez-Iñiguez,
“Filosofía, teoría y ciencias políticas”, en Filosofía política contemporánea
(Popper, Rawls y Nozick), México, Miguel Ángel Porrúa, 2005, pág. 18.
4.
Suárez-Íñiguez,
Op. cit. pág. 12.
5.
Ibídem pág. 19.
6. Sartori, Giovanni.
La Política, Lógica y método en las ciencias sociales. Traducción de Marcos
Lara. 3ra edición. Fondo de Cultura Económica. México. 2002. Pág. 237.
7.
Sartori, Ibídem, pág.
238.
8. Muñoz Patraca,
Víctor Manuel. La disciplina de la Ciencia Política, en Revista de Estudios
Políticos, UNAM. Volumen 9, número 17. México 2009. En: http://www.revistas.unam.mx/index.php/rep/issue/view/2010, fecha de consulta: jueves 14 de marzo de 2013. Pág. 106 y ss.
9.
En el mismo
sentido: Suárez-Íñigez, op. cit. pág. 12, 18 y ss; Muñoz Patraca, op. cit. pág.
95 y Sartori, op. cit. pág. 232 y ss.
BIBLIOGRAFÍA:
- Bobbio, Norberto.
Serie de ensayos. En: Bobbio: El filósofo y la Política. Antología. Compilador:
José Fernández de Santillán. Fondo de Cultura Económica. Sección de Obras de
Política y Derecho .Segunda edición. México D.F. 2002.
- Muñoz Patraca,
Víctor Manuel. La disciplina de la Ciencia Política, en Revista de Estudios
Políticos, UNAM. Volumen 9, número 17. México 2009. En: http://www.revistas.unam.mx/index.php/rep/issue/view/2010, fecha de consulta: jueves 14 de marzo de 2013.
-
Sartori, Giovanni.
La Política, Lógica y método en las ciencias sociales. Traducción de Marcos
Lara. 3ra edición. Fondo de Cultura Económica. México. 2002.
- Suárez-Iñiguez,
Enrique, “Filosofía, teoría y ciencias políticas”, en Filosofía política
contemporánea (Popper, Rawls y Nozick), México, Miguel Ángel Porrúa, 2005, pp.
11-20.